Cuerpos fosilizados supuestamente pertenecientes a entidades extraterrestres de hace 1,000 años fueron exhibidos en el Congreso de México por Jaime Maussan, periodista y científico especializado en OVNIs. Según se informa, estos especímenes, recuperados de una mina de musgo de diatomeas en Cusco, Perú, son afirmados por Maussan como no pertenecientes a la evolución de nuestro planeta. Aunque se llevó a cabo un examen exhaustivo, incluyendo pruebas de ADN y datación por radiocarbono por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los fósiles fueron descubiertos envueltos en una capa de arena.
Maussan insiste en que es crucial reconocer la existencia de formas de vida y tecnologías no humanas, ya que considera que es un derecho del público estar informado sobre tales descubrimientos. Varias otras personas, incluyendo al piloto estadounidense retirado Ryan Graves y Avi Loeb, astrofísico de la Universidad de Harvard, lo acompañaron en la sesión. Sin embargo, la credibilidad de Maussan es cuestionable, ya que estuvo involucrado anteriormente en un engaño muy sonado en 2017, afirmando que un descubrimiento fosilizado en Nazca, Perú, era un niño alienígena momificado, posteriormente desacreditado y revelado como un niño humano con una cabeza artificialmente alargada.
A pesar de los testimonios de Maussan, sus afirmaciones aún carecen de validación científica. Vale la pena señalar que si bien los fenómenos inusuales son cada vez más reconocidos tanto en el ámbito científico como político, sus orígenes siguen siendo controvertidos. Además, la historia de Maussan con descubrimientos desacreditados arroja más dudas sobre su última revelación.
Artículo Original por: Euronews
El artículo original parece inclinarse más hacia la narración de noticias que hacia una postura política. El texto se basa principalmente en los procedimientos y eventos que tuvieron lugar durante la sesión del Congreso de México, en lugar de proporcionar una narrativa opinada o promover una agenda política. Sin embargo, enfatiza la falta de consenso científico en torno a las afirmaciones de Maussan y su participación previa en reclamaciones polémicas y desacreditadas. El tono del artículo sugiere que se trata más de un informe factual, aunque también incorpora un cierto nivel de escepticismo hacia Maussan y sus afirmaciones.
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